Hoy empezamos el día madrugando, sobre las 08:30 nos levantamos, y para las 09:15 horas ya estábamos desayunando, un buen desayuno americano con un bol de copos de avena con fresas, frutas del bosque, leche, trocitos de plátano y un tazón de café con leche, todo excelente.
Nos preparamos para hacer una ruta turística por Manhattan, así que aprovecho para dejaros unas fotos de nuestra habitación, para que veáis lo bien que estamos de acomodados.
Y algo muy curioso y practico que tiene el apartamento, y que nos ha llamado mucho la atención, es que tiene varias zonas de paredes pintadas con una especie de pintura sintética apta para escribir con unos rotuladores indelebles que posteriormente pueden borrarse con la mano, es una pizarra para todo aquel que necesite apuntarse notas o escribir lo que le plazca, el que quiera saber mas puede informarse en www.ideapaint.com
Bloc de notas “on the wall”
Una vez ya preparados, sobre las 10:20 horas abandonamos el apartamento para coger el metro en la 125 th y de manera express y con un par de conexiones por metro llegar a Bowling Green, y desde allí coger un ferry hasta la Estatua de la Libertad. Así que por el camino quise hacer un poco de break dance para ganarme de cerca un eurillo…
Al final lo mas cerca que vi fue el suelo
El clásico autobús escolar
Todos los metros tienen una bandera americana cada dos o tres vagones
Llegamos a nuestro destino, y vamos paseando hasta el puerto donde se embarca al ferry que te acerca a la Estatua de la Libertad, a Ellis Island, y te hace ver una magnifica panorámica del sur de Manhattan. El billete nos cuesta $24, aunque uno nos sale free por cortesía de Burton, que nos dió unas tarjetas de invitaciones para varios lugares de Manhattan. El ferry nos acerca a la Estatua de la Libertad pero por lo visto no nos paró en ella, debido a que estaba en obras por el huracán.
Monumento en honor a las victimas en acto de servicio
Panorámica con la “Freedom tower” de protagonista, cuando sea inaugurado en 2013 tendrá una altura de 541 metros, siendo la tercera torre mas alta del mundo
¿Sabías que?
La Estatua de la libertad es un regalo parisino a Estados Unidos, en 1886 llego en barcos desde el Atlántico en 350 piezas y divididas en 214 cajas. Tiene la curiosa decepción de ser mas pequeña de lo que la gente espera, y es que tiene tanto el pedestal como el monumento unos 45 metros cada uno. La cara de la dama esta inspirada en su madre, y el cuerpo en el de su mujer, está considerada como símbolo de libertad e independencia mundial.
En el ferry conocemos a dos chicas mexicanas de Ciudad de México que disfrutaran de la ciudad de New York durante varios días, un saludo para Monica y Gina.
Nos dirigimos a Wall Street, ya que está relativamente cerca andando y es algo emblemático que todo el mundo debería de ver, la meca de las finanzas tan cerca que no podíamos dejarlo pasar…de camino nos encontramos con otro grupo simpático de Polis.
Pasamos por la Trinity Church hasta llegar a la calle famosa de Wall Street, allí nos encontramos con el carismático monumento dedicado a George Washington.
¿Sabías que?
El toro de Wall Street el símbolo del optimismo, agresividad y prosperidad financiera, tocarle los huevos al toro dicen que trae buena suerte así que a partir de este momento yo creo que ya podemos podemos comprar el euro millón que nos toca fijo, nos toca por ¡huevos!
De camino a la Zona 0 pasamos por el Century 21, un lugar comercial de obligada visita para el amante de las compras baratas, y como hacía un frío considerable, fui en busca de un gorro para abrigarme…al final cayó un gorro marca Levis por 8,90 €, barato no, lo siguiente.
Una vez que estuvo la compra hecha fuimos a comer a un buffet dely donde puedes echarte a una bandeja todo lo que quieras, y te cobran al peso de la misma, por lo que con la cerveza incluida comes muy bien por uno 9 o 10 $ (dependiendo del peso de la bandeja claro)
Cogemos el metro de nuevo y subimos un poco para dirigirnos al puente de Brooklyn, uno de los puentes mas famosos del mundo, uno Manhattan con Brooklyn, mide 1825 metros de largo, los cuales los recorres de una punta a otra, y observas como está construido totalmente de acero, siendo el primer puente que se construyó suspendido con cables de acero.
Después de recorrer los casi 2 kilómetros de longitud del puente, nos adentramos en Brooklyn para tomarnos en la cafetería mas cercana un cafe + cerveza + panackes con fresas, plátano, nata y sirope….buffff que rico. Y con el estomago lleno cogimos el metro mas cercano, y con la línea azul A nos dirigimos a nuestra zona, a Harlem, a la parada 126 th.
Allí quedamos con Burton sobre las 18:15 horas para acompañarle en un partido de baloncesto que se jugaría en Upper East Side, al otro lado de Central Park, en una liguilla de empresa que están jugando unos 20 equipos. Algo tan autóctono como ver una pachanga de baloncesto, aunque nos hubiera encantado mas por lo genuino de la situación a ver visto la pachanga al aire libre en una cancha mítica de baloncesto, no nos podemos quejar de la suerte que tenemos por estar invitados a tal evento.
Todo nuestro pésame a Burton por la dura derrota del equipo (en la última foto es el jugador con el dorsal 42), una vez terminado el match nos marchamos en taxi hasta el apartamento, serían las 20:30 horas, y a las 22:00 horas teníamos una quedada con una persona que nos daría mucha vida al viaje, un detective de la Policía de New York llamado J.V, conocido por Israel en su visita a la ciudad en el campeonato de Policías y Bomberos de 2011 celebrado aquí. Quedamos en la esquina de nuestro apartamento y aparece sobre las 22:20 en su coche particular con su mujer, Kathy. Nos montamos en el coche y nos vamos a cenar a un restaurante Español llamado “Manolo Tapas” situado en el 4165 Broadway (Washington Heights), donde pudimos recordar lo buena que es la comida española: chorizo a la sidra, gambas al ajillo, calamares a la romana, chopitos, jamón serrano y queso manchego….en fin que os voy a contar que no hayáis probado ya, pero es que cuando pruebas estos manjares fuera de tu tierra parece que es cuando mas los valoras.
Una dulce velada con nuestros nuevos amigos cenando comida española y contando historias de nuestras costumbres profesionales, nuestra vida laboral, nuestra tan diferente vida laboral y disfrutando el momento como si fuera el último de nuestras vidas.
Desde “Tómate algo” le damos las gracias a nuestro amigo y su esposa por la magnifica noche que hemos pasado y esperamos poder disfrutar de su compañía de nuevo.
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Este es mi cuaderno de bitácora y experiencias, un espacio de aventuras por los rincones del mundo donde encontrarás anécdotas y curiosidades de mis viajes, así como consejos y sugerencias de cada una de ellos.