13/5/2007

Esta mañana nos hemos levantado temprano y hemos desayunado en el hotel, un buen desayuno continental.

Hoy vamos a pasar el día en la Isla Elefanta (Elephant island), asi que en dos coches nos dirigimos al puerto de Bombay, donde vimos plenamente el centro de la ciudad con avenidas mas grandes, casas mas culturales, pero la misma pobreza y mendicidad, sobre todo cuando visitamos la “lavandería municipal“, allí se nos acercaron decenas de chicos y chicas pidiéndonos limosna, me chocó mucho una chica de unos 11 años tuerta que llevaba en brazos a una bebe (mas tarde me contaban que existen mafias que acogen a niños huérfanos y los mutilan para dar pena y ganar a su costa beneficios, así es la vida en algunos rincones del mundo).

El barco que nos llevaría a la famosa isla partía en el puerto de “La Puerta de la India” (lugar donde los ingleses colonizaron).

Luis, Tomás y yo en la misma “Puerta de la India”

La isla Elefanta es conocida por sus cuevas, está considerada por la UNESCO, Patrimonio Histórico de la Humanidad desde 1987 y los portugueses le pusieron ese nombre por que en la entrada a la isla habían dos grandes elefantes de piedra que ahora están en el museo.

Tardamos 1 hora en llegar desde el puerto, la entrada estaba repleta de puestos mercantiles, souvenirs, refrescos y agua (hacía mucho calor).

Estos barcos nos llevaban hacia la isla Elefante

 

La entrada y la salida de la isla aglomerada de puestos ambulantes

Las cuevas eran espectaculares, llena de esculturas talladas sobre las rocas haciendo mención a los señores de la isla (era todo un poco como “Moria” y “El Señor de los Anillos”).

A lo largo de un sendero subimos hasta lo mas alto de la montaña para ver el “Cañon Hill” (cañon de la colina), y junto al cañon habían unos 5 o 6 monos que se dedicaban a quitarte el agua en el mayor descuido, sedientos y calurosos de todo el día, pude ver como a un hindú despistado le quitaba una botella de coca-cola (todo vale cuando uno tiene sed).

 
La vuelta hacia el puerto se hizo menos pesada y gracias a que estaba atardeciendo era mas amena. Al llegar a “La Puerta de la India” junto al Hotel “Taj Mahal” (es uno de los hoteles mas viejos y caros de la ciudad) nos esperaban nuestros chofers, donde nos llevaron a la otra punta de la ciudad, para ver un mercado muy famoso siutado en DADAR (cuyo significado hindú es “abuelo”), allí pudimos hacer pequeñas compras en una tienda de ropa hindú.
 
Pasan las 8 horas de alquiler del coche y su chofer, asi que nos fuimos al hotel para relajarnos, ducharnos y cenar…y durante el trayecto estuvimos hablando con el conductor sobre la forma de vida hindú y estas son las conclusiones que saqué:
Por norma general los hindúes solo están con una mujer, es mas, lo ven como algo principal en sus vidas, como ellos dicen “no wife, no life”.
La educación es una herramienta esencial en sus vidas, sin escuela no hay cultura.
Y en cuanto al tema policial, mi interesaba saber como reacciona ante ellos, y según ese hombre la policía en la India es corrupta y violenta, nos dio a entender que podría entrar al domicilio de cualquier particular y agredir e incluso violar a tu mujer y no pasaría nada, no dejaba de mencionar la palabra “rape” (violar), me parece increible que sea eso cierto. También nos decía que la policía no se comporta así con los turistas, solo con los nacionales.
En fin, pasando de este tema tan serio y dramático, os cuento algo gracioso que nos pasó de camino al hotel, ya que Jose Luis, empezo a escuchar unos ruidos raros provinientes del coche…eran como gemidos, y realmente eran gemidos por que todos estabamos escuchandolo…y resulto ser una película porno que estaba viendo el conductor a una tele que estaba en ese momento plegada en el techo…jajaja acto seguido nos lo mostro evidentemente…nos echamos unas risas todos juntos…la película la corto para mas informacón, no la dejo el resto del trayecto jajaja.
 
Después de cenar, Jose Luis, Kim y yo quisimos tomarnos algo en un bar que estuviese cerca, y preguntando nos fuimos a uno que estaba a unos 5 minutos del hotel, al entrar nos encontramos con algo muy extraño, habian dos mujeres y un hombre con un micrófono en un escenario y 8 camareros sin hacer nada que estaban pegados a nosotros 3. Hubo un momento que ese hombre pegado a un micro me ofreció subir al escenario y cantar, así me animé y como no sabía que cantar, Jose Luis me animo a cantar el “himno de la huerta murciana”, así que podeis imaginaros la cara que ponían los hindúes cuando vieron el espectáculo jajaja…luego quisieron cobrarme por cantar…y tuvimos que salir pitando del sitio.
Puesto que no teniamos mucho exito en la noche de Bombay y no localizabamos lugares en condiciones, nos fuimos a dormir y a esperar que nos deparaba el siguiente día.
Antonio Abellán

Este es mi cuaderno de bitácora y experiencias, un espacio de aventuras por los rincones del mundo donde encontrarás anécdotas y curiosidades de mis viajes, así como consejos y sugerencias de cada una de ellos.