El otro día tuve la oportunidad gracias a mi amiga Ana de conocer un nuevo rincón de la Región de Murcia, encantador, especial y curioso, justamente en Cartagena, y se llama La Algameca Chica, conocida también como “la pequeña Shangai”. Es ignorado incluso para el propio Cartagenero, de hecho, un joven ciclista se reía vergonzoso cuando me preguntaba si sabía llegar a La Algameca, que siendo cartagenero no lo conocía aún.
Las comparaciones son odiosas, así que cada cual que deje llevar su imaginación hasta donde pueda
Os propongo para este verano que visitéis este lugar, porque además, está muy cerca de unas calas rocosas que son perfectas para pegarte un remojón veraniego, hacer snorkel, practicar buldering sobre las rocas o para los más valientes, saltar de las altas rocas hacia el mar. Pero antes, ¿quereis saber algo de La Algameca?
La Algameca Chica de Cartagena
Una pequeña aldea chabolista, de calidad pesquera, situada al final de la rambla de Benipila, dejando en un lateral el Castillo de Galeras, una fortaleza militar. Su primera casa data ¡del año 1.778!, y desde entonces se ha ido conservando, regenerando, adaptando y heredando entre familias hasta el día de hoy, donde conviven unas 110 familias.
Sus habitantes no quieren cambiar su forma de vida por nada del mundo, el clima que se respira es de paz y tranquilidad. Los más jóvenes los ves bañándose y jugando junto a los porches que dan directamente al mar, mientras los más veteranos disfrutan a la sombra de sus vistas.
Los habitantes de La Algameca no tienen el título de propiedad de sus casas, son desde hace años sus propios dueños sin que un Ayuntamiento haya sido intermediario, tienen una recogida de basuras al inicio del pueblo, su propio abastecimiento de agua y generadores para tener luz (al menos de 8:00 a 02:00) y sus propias reuniones vecinales. Sus largas y estrechas calles están limpias y disponen hasta de una cantina para tomarse un refresco, cerveza e incluso chuches para los más pequeños.
Bañarse, hacer snorkel, buldering o lanzarse al mar desde una roca
Estas son unas de las actividades que podrías hacer si fueses a La Algameca Chica, al final del pueblo hay un camino que desemboca a unas calas rocosas que son dignas de visitar y disfrutar, agua azul turquesa, peces de colores, sol y sombras para todos los gustos.
“Utiliza escarpines para los pies, la zona es rocosa y te servirá para despreocuparte de las resbaladizas y afiladas rocas”.
Puedes dejar el coche en el mismo camino, hay unos recodos que te permiten aparcarlo y seguir bajando un par de minutos hasta ver las calas. Y si quieres rematar la faena, llévate una nevera llena de gastronomía dominguera y disfruta a la sombra de la cala antes o después de pegarte un bañico.
Si quieres saber más, La Algameca Chica ha sido televisada en cadenas como tve, cuatro o antena3, así que os dejo un vídeo que vale más que mil palabras:
Este es mi cuaderno de bitácora y experiencias, un espacio de aventuras por los rincones del mundo donde encontrarás anécdotas y curiosidades de mis viajes, así como consejos y sugerencias de cada una de ellos.