Los 8 imprescindibles de Dublín

Dublín, una de las capitales europeas más visitadas desde que Ryanair (aerolínea irlandesa), decretó sus vuelos a Irlanda a bajo coste, para fomentar el turismo en el país, y lo ha conseguido con creces. Una ciudad fundada hace mas de mil años por los vikingos, una ciudad muy fácil de recorrer y difícil de describir. Pero para el que lea estas líneas y desee explorar sus calles y disfrutar de sus barrios, os dejo una breve lista de lo mas característico de la ciudad:

1. Temple Bar y el resto de pubs

No puedes perder la oportunidad de visitar la zona de Temple Bar y sus pubs, en Dublín hay bares para todos y se vive un gran ambiente.

Es un lugar de visita obligada para tomar una tradicional cerveza Guinness y disfrutar del aire dublinés que se respira. La nota negativa la da el alto precio de sus pintas, entre 4.5€ y 6€, y las botellas suelen ser algo mas caras.

Los bares del centro suelen estar mas concurridos y los irlandeses suelen ser muy fieles a su local, por lo que en general, cualquier sitio es bueno para tomar algo.

“…las tres cosas en las que el mundo piensa cuando oye Dublín son pubs, Guinness y lluvia. Y con la tercera no podemos hacer nada, excepto refugiarnos en un pub a beber Guinness“

Oscar Tindrum – “Historias de un extranjero que viaja“

La fachada de Temple Bar y el interior del pub Bad Bobs

2. Tour gratuito con la empresa New Europe Sandemans

La mejor opción para conocer la ciudad mediante un tour guiado en español durante una mañana, en unas 3 horas y 30 minutos puedes hacerte una gran idea de la historia de Dublín y de los lugares mas destacados del centro de la ciudad. Y lo mas significativo, es que el tour es gratuito, relativamente, hay que pagar unos cargos on line de unos 3€ (algunos lugares ni te cargan eso), y luego allí, dependiendo del grado de satisfacción recibido por el guía y del tour, se le entrega la voluntad por individual. Desde mi punto de vista creo que es una gran opción, y en todas las ciudades europeas que pueda disfrutar de esta oportunidad, sin duda alguna, la aprovecharía.

Si quieres más información sobre Sandemans en Dublín, accede su web oficial haciendo click aquí.

3. Destilería Guinness

En 1.759, Arthur Guinness estampó la firma mas conocida de Gran Bretaña e Irlanda en el contrato de arrendamiento de destilería de cerveza de 4 acres, por la que pagaría 45 libras anuales. Hoy en día esta cerveza se ha convertido en uno de los símbolos de su país, seguramente el más querido por sus ciudadanos, muy poca gente toca el arpa irlandés, pero casi todo el mundo allí bebe Guinness, la cerveza mas famosa del mundo.

La Store House que se visita actualmente, fue una antigua casa de fermentación construida en 1.904 y abandonada en 1.986. Hoy en día es un museo de 7 plantas con forma de vaso de Guinness (como no), donde podrás empaparte de toda su historia planta por planta, hasta llegar al Gravity Bar, un bar a 46 metros de altura donde podrás consumir una cerveza Guinness incluida en el precio de la entrada (unos 18€), y sin duda, observar una de las mejores vistas de la ciudad.

4. Trinity College

Esta histórica universidad fue creada en 1.592 por Isabel I para que la élite de los protestantes tuvieran un lugar de culto y educación sin peligro de contagio por el pueblo católico, y en gran medida como símbolo de poder en la isla. Los católicos tuvieron que esperar 201 años para ser admitidos en esta prestigiosa y famosa universidad. Hoy en día la puedes visitar por unos 9€ de entrada.

¿Qué tiene ademas de especial? 

La Universidad cuenta con el privilegio de recibir copias de todo lo que se publica en el Reino Unido y en Irlanda, por lo que su biblioteca la convierta en la mayor de Irlanda. Entre todo su material, se encuentra el famoso Libro de Kells, 340 páginas escritas e ilustradas a mano hacia el año 800, contiene los cuatro evangelios escritos en latín y en todo color, sus ilustraciones son bellas y muy detallistas, una reliquia del arte y de los materiales que habían en aquella época.

La visita termina en la sala llamada Long Room, una sala de más de 60 metros de largo que alberga unos 200.000 libros, los más antiguos del catálogo. En este lugar dicen, que se rodó o que se inspiró George Lucas para crear los Archivos Jedi en su película El ataque de los clones (aunque también hay gente que lo desmiente, incluido el propio George Lucas).

5. Dublín Castle

Esta fortaleza, situada en la cima de una pequeña colina, quizás sea mas antigua que la propia historia de la ciudad. Se dice que antes de los vikingos hicieran este lugar, los celtas se congregaron para construir un fuerte. Las fortificaciones se sucedieron hasta que en el siglo XIII, el rey de Inglaterra ordenó la construcción de algo más sólido, creando así el castillo de Dublín, que durante mucho tiempo simbolizó el dominio inglés sobre Irlanda.

Si contratáis el tour gratuito mencionado con la empresa Sandemans, pasaréis por este sitio y os contaran su historia y sus curiosidades.

6. Phoenix Park

No puedes irte de Dublín sin visitar el parque mas grande Europa dentro de una ciudad, relativamente cerca, puedes acceder al parque andando, recorriendo el río Liffey, alquilar una bicicleta y atravesar sus 707 hectáreas, o llegar hasta la puerta en tranvía (parada Heuston).

La visita incluye lagos, jardines, manadas de ciervos, edificios públicos, un pequeño centro de visitantes, el Zoo de Dublín y además un monumento al gran vencedor de Napoleón, Wellington, un obelisco de 60 metros de altura rodeado de escalinatas.

7. Esculturas destacadas: Oscar Wilde y Molly Malone

Si eres de los que te gusta retratarte con las esculturas mas ilustres y características de una ciudad, desde mi punto de vista, habría que destacar dos, en primer lugar la figura de Oscar Wilde:

Dublín respira literatura históricamente, y uno de sus autores de renombre es Oscar Wilde, nació y vivió buena parte de su infancia y juventud en Dublín, y es autor de obras de teatro, poéticas, cuentos y ensayo que le dieron fama universal. En Dublín también podemos visitar su casa, y pasear por el Trinity College, que lo vio pasar por sus aulas.

La escultura de Oscar Wilde se ubica en la esquina noroeste de la agradable Plaza Merrion y se dice que hacia dónde dirige la mirada Wilde, se supone que está observando la casa que le vio nacer y donde vivió, en el número 1, Merrion Square (al menos, si no hubiera nada entre la escultura y el edificio). Frente a la escultura, podemos ver dos columnas con frases célebres del autor.

“La sociedad perdona a veces al criminal, pero no perdona nunca al soñador”

Siguiendo por el sur de la ciudad, en pleno centro, te encuentras otro de los símbolos mas especiales de Dublín, la estatua de Molly Malone, personaje del imaginario dublinés inmortalizado en los que de alguna manera se ha convertido en el himno extraoficial de Dublín, cuya letra se lee en la placa del ayuntamiento, y cuya música se oye por las calles hasta altas horas de la madrugada.

La canción cuenta la historia de una hermosa pescadera, llamada Molly Malone. La muchacha murió de una fiebre en plena calle. Se canta que iba por las calles de la zona portuarioa de Dublín, empujando un carro y pregonando “¡Mejillones y Berberechos vivitos!”. Hay más leyenda popular sobre Molly Malone, se dice que era tendera de día y prostituta de noche, pero no existe ninguna evidencia histórica de la existencia de este personaje. También conocida como “la golfa del carro“, es parada obligada para los guías y estandarte de fotos para los turistas.

La estatua de Molly Malone, “la golda del carro”

8. La Calzada del Gigante y el peligroso puente de Carrick-a-Rede Rope

Desde que Jorge me dijo que veríamos un lugar espectacular en Irlanda del Norte, llamado La Calzada del Gigante, me puse a leer y explorar sobre este curioso escenario y su característico título, y si tuviera que convencerte con una sola frase para que no te perdieras esta “calzada” particular, sería diciéndote que es una maravilla geológica declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, envuelta en una leyenda de gigantes. Además, a pocos kilómetros, se encuentra Carrick-a-rede Rope Bridge, un puente colgante suspendido a 24 metros de altura, y que une a una isla pequeña.

Si tienes tiempo te recomiendo 100% que visites esta lugar que te llevara algo mas de medio día pero que no te dejará indiferente, si quieres saber más sobre como llegar a este lugar vía Dublín o Belfast, pincha aquí.

Mucho por ver, y quizás el tiempo juegue en nuestra contra, pero espero que al menos, algunos de estos puntos te hayan servido de ayuda para tomar mejor contacto de Dublín, una ciudad que merece la pena de ver y sobre todo de degustar.