Hoy es nuestro último día en Ushuaia, la ciudad mas austral del mundo, y destacamos varios puntos de este día que no puedo dejar escapar en este post-diario, y os lo voy a describir desde primera hora de la mañana.
La gente viene a Ushuaia y ve casi siempre los mismos turísticos lugares, se hospeda en lugares típicos como hostels y hoteles y come en los restuarantes y bares que sus guías les aconsejan, cosa que está genial igualmente, pero y si os dieran la oportunidad de hacer zumba en Ushuaia, ¿no lo aprovecharíais?, pues gracias a Cecilia tuvimos la oportunidad de hacerlo en su gym, y para mi fue toda una novedad, huyendo en España de este tipo de clases y vengo a parar a disfrutar y sudar con una clase de la zumba mas austral del mundo.
¿Qué es la zumba?
Creo que ha estas alturas todo el mundo habrá oído hablar de la zumba, pero para el que no lo sepa es una disciplina fitness de origen colombiano, enfocado por una parte a mantener un cuerpo saludable y por otra a desarrollar, fortalecer y dar flexibilidad al cuerpo mediante movimientos de baile combinados con una serie de rutinas aeróbicas.
Una hora y media de sesiones de música electro, disco, pop y con una marcha y energía transmitida por la profe de Ceci, que proyectaba descargas de adrenalina en casa tema, hasta el punto de que al ser el único chico de la sala me puso en el escenario a mover el cucú para vergüenza mía, mientras tanto, Mangeles estaba en su salsa bailando y disfrutando, y Soler fue nuestro gran fotógrafo oficial.
Moviendo el cucú mientras la profe chillaba «aproveeeeenchese ahora, aproveeechense»
Terminamos la sesión fotografiándonos con la gran maestra y mi iniciadora en este tipo de terapias anti estrés, ¡chapó! y ¡prueba superada!
El grupo con la enérgica maestra de zumba
Nos marchamos a casa sudando a mares dispuestos a ducharnos, cambiarnos, comer y prepararnos para la excursión en catamarán por el canal Beagle, uno de las actividades de obligada visita en Ushuaia.
De camino a casa de Ceci después de la clase de zumba
Excursión en catamarán por el canal Beagle hasta el faro del Fin del Mundo
Las excursiones en catamarán son, sin lugar a dudas unas de las mejores experiencias y formas de conocer los impactantes paisajes de Ushuaia. Son embarcaciones que hacen de la excursión un momento irrepetible al recorrer paisajes naturales extraordinarios.
- Ruta establecida – Salida por el canal Beagle
- ¿Qué se puede ver? – Isla de los lobos, isla de los pájaros, el Faro Les Eclaireurs (Los iluminados) ó también erróneamente conocido como Faro del Fin del Mundo, y trekking por la islas Bridges.
- ¿Cuánto cuesta? – Nuestra excursión ronda los $450 pesos para los extranjeros y $225 para los argentinos
- ¿Duración? – Unas 3 horas.
Si quieres mas info puedes ponerte en contacto con varias empresas que en el mismo puerto marítimo se encargan de gestionarte la excursión ya sea por la mañana o por la tarde, nosotros fuimos guiados por Ceci pero si quieres saber mas on line solo tienes que pinchar aquí.
July y Soler
Sobre las 14:30 bajamos desde casa de Cecilia en el coche junto a su madre, que nos lleva muy amablemente, por cierto tengo que hacer una mención especial a Susana, su madre, ya que es una gran mujer, amable y con un gran sentido del humor. Al llegar al puerto, nos dicen que la marea ha subido bastante, y que el barco en el que se pretendía salir no va a poder salir debido a la altura de las olas a la que nos veríamos sometidos, son barcos para unos 20 turistas así que tuvimos que cambiar el plan y hacer la excursión en un barco algo mas grande, y la verdad es que mereció la pena porque Ceci conocía a unos de los tripulantes y nos consiguió asientos en la zona vip del barco, en una zona acristalada con sillones muy cómodos. Además de que el barco posee cafetería para tomar algo durante la estancia.
También estuvieron nuestras amigas argentinas July y Paola, que disfrutaron del frió y del viento del barco junto a nosotros.
Nos ponemos en marcha y desde el puerto se comienza a ver una panorámica bien hermosa de la ciudad, una verdadera estampa digna de grabar en cada retina.
El horizonte con el puerto de la ciudad de Ushuaia y la bandera argentina hondeando al viendo
La primera visita por el canal Beagle es a la isla de Lobos, llamada Isla Alicia, donde habita una colonia de Lobos o Leones Marinos Sudamericanos. Se puede disfrutar de la vista de los juegos de estos curiosos y simpáticos mamíferos marinos.
Isla de Lobos (Isla Alicia)
Avanzamos un poco mas hasta la Isla de Pájaros o Isla Despard, donde se puede ver la colonia mas grande de Cormoranes Reales e Imperiales de la zona, familia de los archi conocidos pingüinos.
Cormonares Reales e Imperiales
Siguiendo la navegación llegamos al final de la ruta, para ver uno de los iconos de Ushuaia, el Faro Les Eclaireurs (en francés Los Iluminados), también conocido de manera errónea como el Faro del Fin del Mundo, y este error fue a través de la novela escrita por Julio Verne, llamada de la misma manera , y fue inspirada en el Faro San Juan de Salvamento, enclavado en la isla de los Estados, que está a unos 200 kilómetros al este de Les Eclaireurs. Mientras ese no funciona, Les Eclaireurs está automáticamente en funcionamiento y controlado a distancia, no está abierto al público.
Soler, Mangeles y Antonio y Les Eclaireurs
El faro consiste en una torre de 11 metros de altura y 3 metros de diámetro, pintada en tres franjas: roja, blanca y roja. La linterna se halla a 22,5 metros sobre el nivel del mar y emite luz de color blanco y rojo a intervalos de 5 segundos. Tiene un alcance óptico de 7,2 millas náuticas y es alimentada por paneles solares. El faro fue librado al servicio el 23 de diciembre de 1.920.
Faro Les Eclaireurs
Terminamos la navegación haciendo una parada para realizar un breve trekking de unos 15 minutos, opcionales para todos, ya que fuera hacía un aire y un frío de mil demonios, pero siempre merece la pena bajar y pisar tierra firme en un lugar tan austral, y hacerse la foto de rigor en una de la islas Bridges, lugar donde indígenas como la Yámanas o Onas navegaban con sus canoas y cazaban leones marinos.
A la vuelta, y antes de bajarnos del barco, hicimos de patrón de barco por unos segundos para ilusión de todos.
Jose y Antonio de patrones del barco argentino
Antes de irnos dejamos nuestro sello habitual
Cuando terminas la excursión hay un detalle muy importante que debes de saber, lleva tu pasaporte encima y justo en frente del puerto marítimo tienes que ir al puesto de información y turismo, allí te pondrán un sello en el pasaporte como que has estado oficialmente en el Fin del Mundo. La verdad es que es un detalle un poco pintoresco, pero puedes tomártelo como un souvenir mas y la verdad sea dicha, hay varios sellos y puedes elegir el que quieres, y están muy conseguidos.
Al salir del puerto marítimo Ceci nos avisó de que había un escrito en la misma entrada al puerto, que hacía alusión a los buques ingleses, la polémica por las Islas Malvinas se palpa en toda la Patagonia y Argentina entera.
Prohibido el amarre de los buques piratas ingleses
Cecilia nos quiso enseñar un lugar donde se podían ver otras vistas de la ciudad muy bonitas, desde un hotel que está a unos 3 kilómetros de Ushuaia, y para Jose Luis y para mi fue una sorpresa que Ceci nos dejara llevar su coche, al parecer el español no necesita sacarse el Permiso Internacional para conducir durante 3 meses en territorio argentino, la verdad es que no lo se a ciencia cierta, pero nos hizo mucha ilusión poder parte del tráfico argentino.
La conducción tuvo ningún incidente, el tráfico nos es tan caótico y lo mas destacable es que en los cedas el paso debes de llevar cuidado porque aunque lleves prioridad se intentan meter todos los coches si dudas y aminoras la marcha.
Llegamos al hotel y encontramos unas vistas encantadoras de la bahía, el hotel era de lujo, durante una hora estuvimos sentado en un enorme sillón en forma de semicírculo, varias Quilmes y una tosta de jamón york y queso antes de marchar a casa.
Mangeles observando las vistas del hotel
Llegamos a casa de Cecilia, y hoy por ser nuestra última noche, teníamos un banquete preparado, mientras nosotros hacíamos una tortilla de patatas para nuestra familia argentina, ellas encargaron centolla (dicen que está muy rico aquí) y Susana preparo un asado argentino que estaba para chuparse los dedos, lo demás, vino, cerveza y la mejor compañía para terminar una noche inolvidable.
Sólo tengo palabras de agradecimiento para personas que nos han hecho sentir como en casa desde el primer segundo de nuestra estancia en Ushuaia, y todo ellos gracias a la magia de Couchsurfing.
Comiendo asado argentino y centolla junto a Susana y Cecilia
Si te ha gustado este post no dudes en darme un like en el login de facebook, ¡muchas gracias!
¿Cómo es un viaje a Argentina?
Este es mi cuaderno de bitácora y experiencias, un espacio de aventuras por los rincones del mundo donde encontrarás anécdotas y curiosidades de mis viajes, así como consejos y sugerencias de cada una de ellos.
