Buenos días gente…hoy hemos madrugado para poder aprovechar el día el mayor tiempo posible, nos quedan cosas que comprar y la vena consumista está en modo ON, pero antes no puedo dejar de mencionar la anécdota de la noche, ya que se escucho un tiroteo por la calle de la avenida, según Israel hasta nuestro anfitrión de despertó y todo para ver que es lo ocurría desde el 4 piso de nuestro apartamento, y al parecer observo a un policía salir de un coche y gente corriendo, pero yo personalmente no escuché nada ya que estaba en el quinto sueño y ya tengo que tener un bombardeo a metros mía para despertarme.

Desayuno con Burton a lo american breakfast con huevos revueltos, sándwiches de mantequilla y un tazón de café hasta el borde del desborde, y a planear los “mandaos” del día…jugueteria FAO Schwarz, Century 21, Chinatown, tienda Adidas…y sobre la marcha. Pero antes teníamos que ver Times Square de nuevo, de día…y como siempre, es espectacular e incansable.

Vamos a la tienda FAO Schwarz…y nunca antes había disfrutado antes tanto en una tienda de juguetes, hay de todo y es enorme, los dependientes juegan con los juguetes que quieren vender y los ofrecen a los niños, juegan con ellos y se pasan el día jugando, hay infinidad de productos que podrían hacer que un niño estuviera con sobredosis de glucosa durante todo el día, y a nosotros nos pasó lo mismo.

 En FAO Schwarz los dependientes juegan in situ con los juguetes y te hacen participar con ellos

 

Estuvimos buscando el regalo estrella del año en la juguetería, lo vimos el primer día que estuvimos (el día en bici) y nos quedamos pendientes de comprarlo hasta hoy, pero en FAO ya no quedaban…hablamos de un helicóptero como este… 

Estaban agotados así pregunte si había alguna manera de hacérmelo llegar a casa, y un dependiente llamado Cesar me acompaño hasta la parte del sótano, donde estaba el departamento de oficina y pedidos, me dice quédate en esta sala de espera y pregunto como ayudarte para que te envíen a tu domicilio el pedido.

Y cual fue mi sorpresa cuando, el chico sale diciéndome “Que suerte has tenido, tenemos aquí el único “Interceptor” de la tienda, además lo puedes pagar aquí sin hacer colas y todo“…buah menuda alegría por que el que helicóptero es la hostia.

Nos marchamos del bullicio infantil y nos vamos al de Century21, mas compras con las rebajas entre nosotros, aunque  antes comimos algo en el mismo Deli del otro día, cerca de Starbucks.

No pudimos disfrutar de muchos descuentos en lo que nosotros compramos pero vamos nos salió todo tirado de precio: corbatas, carteras, cinturones, etc. Luego tuvimos que coger un taxi por que las distancias no nos permitían ir en metro, y fuimos a Chinatown, allí terminamos de comprar lo que necesitábamos y por último otro taxi hasta Prince St para visitar la casa Adidas. Terminamos con la vena consumista para irnos al apartamento…Pero como no podía ser menos, nos pasamos nuestra parada de la 125 th, a la 145 th, al bajarnos del metro, y con las puertas ya abiertas durante varios segundos, salimos Israel y yo…y Bartolo se queda el último aguantando la salida del resto…a eso que le dice Israel: “Bartolo que te quedas” y así fue…las puertas se cerraron y Bartolo se fue hasta la parada 170 th en lo mas profundo de Harlem.

¡¡Bartolo que te quedas!!

Así que Israel y yo nos marchamos a esperarle en la puerta del apartamento (él tenía las llaves), hicimos tiempo comprando unas cervezas, aprovechando el WIFI del Starbucks que hay cerca de casa, y apareció a los 30 minutos…“jajaja se ha partido de risa todo el vagón al intentar verme salir dándole a todos los botones“.

Llegamos al apartamento y nos preparamos para la última noche en New York, quedamos a las 23:30 con Romio Santigo (nuestro colega del día del helicóptero) para entrar a la disco Copacavana. 

Llegamos al lugar a estar en la 47 th con la 8 avenida, y en la puerta está esperándonos Romio Santiago, vamos a entrar al Copacavana y no nos dejan pasar por que si no llevas botas y camisa es imposible…así que sin mucho pena entramos a la disco de al lado, que ni recuerdo como se llamaba pero nos lo pasamos genial…así que aquí va una remesa de fotos de la noche.

A las 05:00 am una porción de pizza a gusto y al apartamento. Mañana toca recogida y vuelta a casa, pero antes hemos quedado para comer con Jose Vargas, su mujer Kathy y unos amigos suyos en un restaurante japones…ya os contare que tal ha ido todo el final del viaje, en territorio español, ¡olé!

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Antonio Abellán
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Este es mi cuaderno de bitácora y experiencias, un espacio de aventuras por los rincones del mundo donde encontrarás anécdotas y curiosidades de mis viajes, así como consejos y sugerencias de cada una de ellos.